Serie «Ojitos de huevo»: risas con dignidad en un contexto de estigma

La serie «Ojitos de huevo» se mantiene en las tendencias de Netflix pues representa crítica y dignidad en contraste con la humillación, estigma y discriminación que han vivido las personas con discapacidad en la televisión mexicana.

La serie mexicana «Ojitos de huevo» se mantiene en las tendencias de Netflix por tercera semana consecutiva, no sólo en México sino en 17 países de latino américa. Estos números reflejan la frescura que ha implicado esta serie, en un país en el que las personas con discapacidad en la televisión masiva han sido estigmatizadas y humilladas.

«Ojitos de huevo» es una serie mexicana protagonizada por Alexis Arroyo y Kike Vázquez, ambos son comediantes y personas que viven con discapacidad, también se dedican, respectivamente, al periodismo y la escritura y al activismo y la psicología. Desde antes de su estreno, esta serie ya estaba siendo celebrada por colectivos como un producto cultural que no estigmatiza a personas con discapacidad. El día del estreno destacó por acciones de accesibilidad como menús en braille y una sala de cine donde todos los asistentes podían tener un lugar propio.

Desde su primer día en Netflix la serie se coronó con el primer lugar en tendencias. Y es que algo que es notorio desde el primer capítulo es que la serie, a diferencia de otras narrativas sobre personas con discapacidad, no está escrita desde la carencia y la imposibilidad, sin por eso caer en la pronografía inspiracional. Al contrario, está contada de una forma honesta, digna, humorística y crítica hacia el capacitismo.

En estas semanas en que la serie ha estado en auge se ha vuelto popular que Alexis «ojitos de huevo» es una persona que se ríe de sí mismo y, por lo tanto, de su vida con discapacidad visual. El humor hacia la discapacidad ya se ha visto antes en la televisión mexicana sin embargo como sucedió con personas como Samy y Margarito, eran situaciones humorísticas en las que ellos no eran complices sino que se les humillaba y la risa surgía como una consecuencia de faltarles al respeto.

Bueno sería decir que esto fue un error del pasado y ya no se replica dentro del mundo mexicano del entretenimiento pero no es así. Este año se estrenó la telenovela «Tierra de esperanza» donde se incluyó a un personaje con discapacidad auditiva que, de acuerdo con el portal especializado en discapacidad «Yo también», caía en la desinformación y la falsedad, pues no se profundizó en la realidad que viven las personas con esta condición de vida y muchas de las señas incluidas como representación de la Lengua de Señas Mexicana eran ininteligibles.

De la misma forma, esta año el bailarín «Medio metro» participó en el programa las estrellas bailan hoy, en varias ocasiones ya se ha evidenciado el maltrato y la discriminación que vive por lo que su presencia en el programa antes mencionado representa un elemento de moro sin profundizar en la marginación laboral que viven las personas de talla baja, siendo históricamente relegados al espectáculo por medio de la exotización y la deshumanización. 

El autor de los cuatro ejemplos mencionados es el mismo: el Canal de las estrellas. Y, por desgracia, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Consumo de Contenidos Audiovisuales, se mantiene como el canal más visto por la población mexicana, promoviendo de forma masiva la discriminación, la humillación y el entretenimiento sin profundidad ni critica.

Esta es una de las razones por la que la serie «Ojitos de huevo» resulta importante, pues en contraste con el contexto de discriminación y humillación dentro de la televisión mexicana, brinda una narrativa en primera persona, donde las personas con discapacidad, en este caso Alexis y Kike, eligen el humor teniendo ellos el control, son complices de las risas, critican lo que no les gusta o les parece absurdo y, en todo momento, mantienen la dignidad.

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